Friday, February 16, 2007

ARTÍCULOS A LA DERIVA

Más allá de las intenciones originales del autor, un mismo artículo, lanzado en las procelosas aguas de la red, puede utilizarse para casi cualquier cosa. Desde que los medios tradicionales reproducen sus contenidos en páginas web y en especial a partir del advenimiento de los blogs y la irritante tendencia de algunos de ellos de convertirlo todo en un gigantesco hipertexto, los artículos circulan sin control y se posan en destinos tan azarosos como arbitrarios. Notas mías publicadas en este suplemento han aparecido, a veces hasta con el mismo formato con el que los colgó el diario en la red, en páginas de exiliados cubanos, en asociaciones anti o pro piratería, en círculos feministas, en páginas de estudios religiosos, en foros de jazz, en crípticos blogs de amplio aliento filosófico y en sitios de análisis económico y empresarial, por citar sólo a algunos, sin aviso ni pedido de autorización ni al autor ni al periódico, tanto proporcionándome un honor a veces dudoso como sumiéndome en el desconcierto de la caprichosa miríada de interpretaciones que pueden generar esas palabras lanzadas a la deriva, lejos, tan lejos del cometido con que fueron escritas.
Nada de malo hay en ello: mediante este proceso, internet nos devuelve, por fin, la lectura como objeto, nos pone ante el efecto concretizado, nos permite vislumbrar algunos de los desvíos o caminos posibles, de las reflexiones y los reflejos, que un pensamiento redactado puede adoptar para los demás. Si hacemos un esfuerzo por no detenernos en el riesgo inevitable de la tergiversación, los autores de esas notas reinterpretadas y desviadas hacia otros objetivos reciben un privilegio tan fascinante como ominoso y tan deseado como temido: estar frente a frente ante la mirada del lector, ese otro que creíamos inexistente.

No comments: